La ruta de Sant Honorat nos permite descubrir uno de los parajes más espectaculares del Prepirineo catalán: la sierra de Sant Honorat, un macizo de origen calcáreo que nos ofrece riscos vertiginosos, grandes mesetas en altura y unas vistas privilegiadas de todo su entorno.  

Durante su recorrido de 9,6 km., pasarás por El Roc de la Presó (o Picapoll) el cual fue, según la tradición local, utilizado como prisión durante las guerras carlistas dada su localización entre grandes precipicios. 

Si estás de suerte, podrás ver des del Roc de Rombau, los buitres volando a tu alrededor o divisar algún corzo, ciervo o jabalí en su hábitat natural. ¡Experiencia brutal! 

Desde el hotel Can Boix, disfrutarás de una ruta de senderismo circular donde sus parajes, fauna y flora, junto con el silencio que se escucha durante la misma, conlleva una desconexión total y una experiencia inolvidable. Sólo superable, al llegar a tu refugio, Can Boix, donde te sentirás como en casa y tendrás a tu disposición todas las comodidades que cualquier huésped. 

Disfrutar del senderismo es el motivo principal de la estancia de muchos visitantes. Can Boix de Peramola forma parte de la Marca Senderismo en Cataluña de la Agencia Catalana de Turismo. 

• Duración: 4 horas aproximadamente 
• No olvides: llevar ropa cómoda de deporte 

Aragón ofrece una infinidad de rutas y paisajes. Desde el corazón de los Pirineos nos ofrece los más míticos puertos de montaña de España y Francia. Si te gustan las curvas esta ruta puede ser inolvidable ya que las únicas rectas que encontrarás en todo el recorrido son aquellas que el tazado necesita para pasar de un giro de derechas a uno de izquierdas o viceversa. Sin embargo, dada la cercanía de la provincia catalana de LLeida y la belleza de sus paisajes aprovecharemos para conocer la parte más próxima a Huesca con nuestro Porsche Taycan.

Comenzaremos la ruta desde el hotel con encanto especial recomendado por ruralka Can Boix de Peramola, en la localidad de Peramola. Situado en plena naturaleza, en medio de impresionantes sierras prepirenaicas leridianas, donde el entorno natural ha creado un paisaje único que invita a la calma, podemos descansar y contemplar estas impresionantes vistas desde sus amplias habitaciones.Además, podremos disfrutar de su sauna o cálida chimenea en invierno y de la deliciosa carta de su cocina basada en productos de la zona. ¡Todo un lujo!

Antes de comenzar la ruta, tendremos la posibilidad de cargar nuestro Porche en su punto de carga eléctrica para tener una buena ruta y despreocuparnos de ello.

Por la N-230 llegamos a Graus el primer pueblo por el que pasaremos en nuestra ruta. Es una parada obligatoria, su casco antiguo fue declarado Conjunto Histórico- Artístico y sus fiestas patronales han sido declaradas de Interés Turístico. Esta zona es rica en yacimientos arqueológicos, como los restos de la cultura de la edad de bronce en las cuevas del Moro de Olvena y la ciudad romana de Labitolosa en La Puebla de Castro. Destacan en Graus, la Plaza de España, las casas solariegas, la Basílica de Nuestra Señora de la Peña y ¡mucho más! ¡Os invitamos a descubrirlo!

Por la N-260 nos topamos con Aínsa, declarada Conjunto-Histórico-Artístico, presenta en su casco antiguo un conjunto uniforme y apiñado de casas enormemente armónico, en el que destacan la esbelta torre de La Colegiata y el enorme recinto del castillo. Conserva casi totalmente las murallas que lo rodeaban, y está plagado de monumentos que nos retrotraen al medievo destacando la iglesia románica de Santa Maria, de la primera mitad del s. XI y la ciudadela.

El siguiente lugar en el que haremos una parada es Broto por la N-260, situado junto al Río Ara, es un mirador excepcional del impresionante Mondarruego y es entrada al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido por su vertiente oeste. No debemos perdernos la visita a la Cascada del Sorrosal, una Vía Ferrata que se encuentra en la misma localidad de Broto.

A continuación, iremos a Jaca por A-23 antes de subir a la montaña. Conocida como la “perla del Pirineo” es una parada fundamental del Camino de Santiago. Cabe destacar la visita a la Ciudadela del siglo XVI y declarada Monumento Nacional. También es recomendable visitar su Catedral románica (siglo XI), declarada Monumento Nacional, el Monasterio de las Benedictinas, la Iglesia de Santiago, la Ermita de Sarsa, el Puente de San Miguel, la Torre del Reloj (siglo XV) y el Ayuntamiento. Aquí haremos una parada gastronómica para disfrutar de las delicias de la cocina de aragón. El Alto Aragón se caracteriza por una cocina montañesa donde predominan los sabores fuertes, la carne de caza y los asados son los platos estrella pero sin cobrar menos protagonismo las setas o espárragos montañeses. En definitiva, platos para combatir el frio que hay en la región y que podrás degustar en cualquier parada de la ruta.

Continuamos la ruta con nuestro Porsche tomando rumbo hacia el norte y con dirección a los Pirineos llegamos a Biescas, una villa situada sobre un antiguo valle glacial, hoy fluvial, se extiende a ambos lados del río Gállego. A escasos minutos de las estaciones de esquí de Formigal y Panticosa así como del Parque Nacional de Ordesa se ha convertido en un atractivo turismo del Valle de Tena permitiendo disfrutar a lo largo del año de un paraje natural y una estancia agradable en pleno pirineo.

Comezamos a subir el Puerto de Monrepos, largas rectas con el frente montañoso, luego subida de tipo medio con alguna horquilla y enlazadas rápidas más algún tramo mixto. Dejando atrás el embalse de Arguís y continuando la ascensión a media ladera la cima nos deja unas vistas impresionantes del gran valle sinclinal del río Guarga y las sierras de Aineto y Lupera al sur y las de Portiella y Galardón al norte.

Para terminar la ruta iremos por Sallent de Gállego al lado de Formigal, enclavado en un paraje natural de extraordinaria belleza es un pueblo típico del Pirineo Aragonés. Posee una bellísima iglesia gótica de principios del s. XVI. Es recomendable visitar el puente y la plaza, con un triple arco románico pero sin duda uno de los atractivos de Sallent es su situación privilegiada, punto de partida de numerosas excursiones hacia el Circo de Piedrafita, Picos del Infierno e Ibón de Anayet, donde se pueden admirar magníficos paisajes.

Una ruta por la montaña en la que no faltará la degustación de la deliciosa gastronomía aragonesa y los paisajes montañeses para guardar en la retina mientras disfrutamos de la conducción de nuestro Porsche.